jueves, 19 de diciembre de 2013

Poemario "tú" - estracto-

Poema Extraído del poemario "tú" recién publicado por Rafael Castro y que lo puedes adquirir pidiendoselo a su autor en rafaelcastromartin@gmail.com o bien por 630 107 638

IX

Somos

Éramos pasado del presente, 
ya somos presente del pasado,
pero hay que seguir luchando,
para no sentirse parado.

la vida fluye, lo dijo Heráclito,
que todo en la vida fluye,
y se mueve a cada paso.

Pues luchemos con uñas y dientes,
lucharemos por alcanzarlo,
un mundo mucho más perfecto,
más hermoso y menos raro.

que la vida es camino,
y el comino voluntad,
lucha pronto por tu meta,
ponte pronto un ideal.

El sueño de todo hombre,
en la vida es progresar,
y aquél que así no lo hiciera,
verá su camino hacia atrás.

No pierdas tu estela,
no pierdas tu voluntad,
que nadie dice que sea fácil,
que lo bueno, ya vendrá.

si la vida no sonríe
sonríele tú y verás
hay cientos de momentos
de plena felicidad.


Si no luchas, Si te entregas,
estás perdido ya,
plántale cara a la vida,
y esta te sonreirá.

yo fui lo que era,
el amor me cambió
¿por qué no lo intentas?ç
la vida te cambiará

Rafael Castro Martín


miércoles, 11 de diciembre de 2013

Entrevista en la Radio Descubre tu verdad

 Entrevista a Rafael Castro sobre el nuevo poemario qu eacaba de salir al mercado con motivo de las compras navideñas... un momento esxcelente para regalar algo tan bello como regalar sentimientos d eamor en formato poético

martes, 3 de diciembre de 2013

¿Tertulia literaria? ¿Tertulia leidiaria?

Es curioso ver como ahora que la cibernética todo lo posee domina y controla, de repente los cafés con tertulias literarias desaparecieron de la faz de la tierra, los literatos no se reúnen en tertulias y si lo hacen es algo que, un servidor, practicante ferviente de este vicio llamado "escribir" o entendió nunca...

Se dice "Tertulia literaria" es decir donde la gente que escribe y la gente que sabe practicar el noble arte de la rapsodia y la declamación se reúnen, unos tal vez para traer sus escritos otros para aportar su granito de arena. Sin embargo, es curisoo ver como en todas las tertulias literarias, al menos a la squ eyo he asistido, y que, evidentemente, no frecuento, rara es la vez que venga un escritor qu esolo traiga el escrito... el escrito trae  el escrito y lo lee, lo recita, lo declama...  y en tal circunstancia el que fuere y no lo hiciera de esta singular forma acaba siendo un ser "extraño" porque no lee, 

- Perdone - decía yo con mi tono entre indignación y sarcasmo - yo vengo como escritor no como lector, yo no sé leer, ni puedo ni  debo
- Pero... - oh sorpresa, oh estupor...- pero si usted lo ha escrito, bien lo tuvo que leer cuando lo escribió - miraba atónita aquella bella joven mientras se acariciaba el pelo tal vez pensando "qué bien lo he dicho..."
- Ciertamente esa es una posibilidad, sí, lo he leído que duda cabe, en mi mente mientras lo escribía, después no, para eso tengo a  mi corrector y estilista que me dice si es apta o no y, en consecuencia yo vengo como escritor para comentar u opinar d ecosas de escritores no de lectores
- Es que aquí todos venimos a leer
- Entonces no pongan "Tertulia de escritores", pongan encuentro de lectores y disfruten de su lectura y su egolatríamientras se oyen a sí mismo lo bien qu ese leen lo suyo...
- disculpeme señor - me dijo un joven de jersey de espuma ceñido y bufanda al cuello con melena rizada tal vez antigua y con pinta de cierta bohemiedad contenida propia de la profesión - aquí no s ele he ofendido y no hemos pretendido nada de ello, simplemente contrastamos lo nuestro con lo de los demás
- si así fuere, su texto lo leería otro y el de otro lo leería usted, no que así cada cual lee lo suyo y eso... eso supone una egolatría que nada tiene que ver con el noble arte de escribir sentimiento y pasiones, historias y fantasías...

Aquello inundó todo el salón donde estábamos todos y ciertamente el estupor hizo que el silencio quebrará el oído má sfino

Asi pues, reúnanse literatos y hablen, no lean, no rapsoden, no declamen el encuentro es de literatos no de grandes declamadores ni de rapsodas estupendos. Así sucede en los premios con grandes lecturas preparadas y sendos discursos escritos que leen los que los escribieron... o algún estilista que escribe solo discursos pues también noble profesión es aquella de escribir por encargo de otro pra quien le pague... 

Sorpresa mía fue en recientes fechas ver una presentación de un poemario de sonetos donde nada se leyó del referido libro, nada se mencionó de lo que allí estaba escrito y sin embargo, fue sobrecogedora y no carente de simpatía la misma, lo que indica que aquél que sabe escribir bien puede saber hablar sin necesidad de aferrarse a su texto...

Seamos libres, expontaneos, originales, únicos... esa es la magia de la condición humana y sin embargo estamos cayendo en el borreguismo de todo lo de todos igual...  como las ovejas al matadero... 

Así pues tertulia entre literatos de literatos con literatos y por la literatura ¿Les parece....?

muchas gracias

Rafael Castro Martín
lince Apache


lunes, 2 de diciembre de 2013

El “Me gustismo” social




            En una sociedad donde lo imperante es la información, donde sabemos al instante lo que sucede en Nueva Cork, en Angola o en Filipinas. En un proceso donde la telemática, la tecnología de vanguardia choca frontalmente con la pobreza y la incultura más extrema, es curioso ver como apenas si hablamos con el vecino, en el caso de que lleguemos a conocerlo, como ignoramos qué vida lleva alguien que trabaja codo con codo en nuestra misma oficina… desconocemos las inquietudes del colectivo de personas que estamos ocupando un mismo entorno laboral o social, en esencia, estamos muy bien informados, tal vez porque ello favorece estar dispersos en el universo social y muy muy poco comunicados.

            En esta locura social, a la que eufemísticamente le hemos dado en llamar “estado del bienestar”, “Sociedad desarrollada” y más aún  “sociedad civilizada”, nos encontramos que esa falta de comunicación que se va poco a poco manifestando dentro d elas propias redes sociales que fueron, otro tiempo, líderes d ela comunicación sí, pero donde tiempo y especialmente espacio no tienen cabida.  En ocasiones se anuncia un evento del tipo que fuera en la red que se quiera y ves como la gente indiscriminadamente pone “asistiré” aun cuando dicha persona se encuentre en el Cairo, o en Caracas y el evento sea en Madrid, “asistiré” como si pudiéramos ser y poseer el don d ela ubicuidad, estar en tantos sitios como se deseare… lo cual es incomprensible y muchas veces no se acaba de concebir bien la idea de “leer todo” lo que el evento anuncia… “¿Para qué? – se dicen en ocasiones – ya lo anunciarán bien” y bien anunciado está solo que se nos ha enseñado gracias a la publicidad a verlo todo en un único momento, un único instante y se  ha perdido esa mágica capacidad de mantener una conversación coherente, larga, distendida de opiniones, contrapuestas incluso donde el respeto a la otra persona es imperante  a ambos interlocutores…  Eso que se enseñaba en la Grecia clásica más pura, la dialéctica,  la oratoria y la maieútifca… aquello lamentáblemente, mucho me temo que quedó en el olvido y en el vago recuerdo de aquellos, nostálgicos tal vez, que nos gusta pensar que el hombre es un ser lleno de posibilidades y recursos…

            Así las cosas, es frecuente, incluso muy frecuente ver como a cada dí aumenta de forma exponencial y vertiginosa el uso de redes sociales, bien por la ciudadanía y los  colectivos sociales como por escritores, artistas, políticos y personalidades del ámbito publico para anunciar sus sucesivos desarrollos, progresos y actividades novedosas. Pero es cierto, y ello lo he comprobado en propia carne y no por tercero, que en ocasiones toda la conversación de la inmensa mayoría de los iternautas se limita a un leve “clic” en su ratón que, en muchas ocasiones lo tiene integrado en un ipad, smarphone o similar… un “me gusta” otro tiempo hubiera supuesto… una larga crítica, un largo comentario, tal vez una tertulia, sentados largamente en un mesa tomando un café o un chocolate donde el tiempo parecía detenerse en aquellos cafés de tertulia literaria… En mi caso soy persona muy dada a estas circunstancias y motivo de esto es que escribo sendos comentarios como la presente nota… a lo cual, solo recibo como respuesta, lejos de encontrar comentarios, opiniones, sugerencias o invitaciones a debatir la propuesta en un “tête à tête”, me encuentro, como no podía ser de otro modo por otra parte un “me gusta” o varios, hasta el punto que el hecho de encontrar varias personas qu eles gusta ya es aceptado socialmente casi como un éxito pues supone que varias personas se han llegado a molestar en pulsar el botón del “me gusta”, Gran esfuerzo y sobrecogedor el empeño del lector que así lo hizo por deferencia del que ni siquiera se plantea semejante homenaje al que escribió aquellas líneas. Pero aún podría decir más… en ocasiones he dejado deliberadamente de escribir con la frecuencia normal y se me ha requerido por algunos de mis lectores por si me encontraba enfermo o tenía algún tpo de dificultad

-         ¿Está bien?
-         Sí sí claro ¿por…?
-         Hace días que no veo nada publicado suyo…
-         Ah, usted me lee
-         Sí claro todos los días, dice cosas muy interesantes y de forma divertida, es algo ingenioso y me gusta su estilo
-         ¿Y porque no lo pone abiertamente en un comentario?
-         Bueno… y apongo que “me gusta”
-         Ah, entiendo…


“Ya he puesto que me gusta”, frase qu engloba lo antedicho, es decir si alguien le pone qu ele gusta ya está diciendo todo cuanto piensa de usted, la opinión del comentario, la afición por su estilo, su forma, su contenido, su textura literaria o cronística… vamos el poder de un “me gusta” es algo tremendo, dos palabras de un valor, otro tiempo nunca tan valorado como en el presente.

Confiemos pues que este “me gustismo” sea algo transitorio y como toda moda en estos tiempos sea fugaz y no deje secuelas para volver, afortunadamente a mantener aquellas viejas tertulias del café NIKE o del café de levante… tertulias que murieron por aburrimiento ya que con un “me gusta” ya estaba todo dicho.


Si he conseguido que este artículo haya comentarios más extensos de un “me gusta”, conseguiré sin duda un gran triunfo en mi propósito, si no es así… esperaré pacientemente a que este virus se extinga como un dinosaurio más en espera eso sí de que sea  a la mayor brevedad para el bien de la humanidad y su capacidad de comunicación

lunes, 25 de noviembre de 2013

Lope de Vega - un soneto me manda hacer Violante

hoy era el día que hubiera cumplido año el señor Lope de Vega, persona de vida intensa que no agraciada y cruzada con la qu efuera d edon Miguel... de Cervantes se entiende.
Sirva pues a  los presentes humilde mensaje y homenaje este


miércoles, 20 de noviembre de 2013

un poemario de amor para el corazón



El poemario que Rafael Castro Martín, su autor, presenta en esta ocasión y que ha salido hoy a la venta, expresa sus propios sentimientos puros, líricos desenfrenados de adolescente, juvenil  que poco a poco, en el devenir del mismo texto va madurando sin dejar, en ningún momento la pasión como hilo conductor hacia el centro del poemario: su esposa.

Así, el autor recorre desde el momento del "ahora", lo que fue, lo que es y, posiblemente, lo qu eserá el sueño del amor de su vida, ese ideal que todos hemos tenido de manera más onírica en la juventud más real en la madurez y más decaída en la edad adulta e incluso en la vejez. Pese a ello, el autor en ningún momento baja el listón de la pasión que siete hacia ese ser  que  es su compañera de vida si bien, en ocasiones, como intentando que esa pasión se disemine si qu9iera brevemente, salen temas ajenos a la pasión y el amor a una mujer, aparece el amor al mar, a la vida, a la infancia, al recuerdo... amores todos que quedan relegados cuando volvemos al amor con mayúsculas ese amor del que todos soñamos tener en algún momento de nuestra vida.


"tú" fue criticado como excesivamente apasionado y poco refinado en la estética, si bien, el autor, quiere precisamente eso, irradiar la felciidad que le conmueve y con ello infectar de esa felicidad a todos cuanto lo rodean... as-i pues, siendo esa la intención, al menos así me lo comentó a mí, está perfectamente narrado en versos de rima libre en ocasiones y en otras muy al estilo medievo imitando a Garcilaso por el que tiene gran predilección.

"tú" es una obra que cualquier novio se  lo puede leer  asu novia, un padre a un hijo, un hermano a una hermana pues, como indica el propio autor en la dedicatoria inicial, va dirigido, al margen de a su mujer "a todo ser con capacidad de amar".

Disfrútenlo, merece la pena

Ameadeo de Andrés
(crítico literario)

lunes, 11 de noviembre de 2013

"juego mental"


¿Qué es lo que hacemos los que nos hacemos llamar escritores? jugar con escritos, y de los escritos trabajar en numerosas ocasiones con términos dobles con sentidos polisémicos de los cuales el español es de los más ricos y tal vez por ello le da más juego y ayuda a la picaresca y la sagacidad  mordida de buscarle varias expresiones a una misma situación. Este es un sencillo ejercicio encontrado por ahí y que nos permite ver cuan  ingenioso fue, cuando menos, el qu elo creó




jueves, 7 de noviembre de 2013

Tal día como hoy...


Ta día como hoy hubiera cumplido el gran Alberto 100 años. Lamentablemente, como él mismo dijo, no hay nada más estupido qu emorir en un accidente de tráfico, accidente que luego  a él mismo le costó su propia muerte

Albert Camus nació en una familia de colonos franceses (pieds-noirs) dedicados al cultivo delanacardo en el departamento de Constantina. Su madre, Catalina Elena Sintes, nacida en Birkadem (Argelia), y de familia originaria de Menorca, era analfabeta y casi totalmente sorda, fue quien enseñó a Albert Camus tanto el castellano como el catalán, idiomas ambos que dominaba perfectamente.1 Su padre, Lucien Camus trabajaba en una finca vitivinícola, cerca de Mondovi, para un comerciante de vinos de Argel, y era de origen alsaciano, como otros muchos pieds-noirsque habían huido tras la anexión de Alsacia por Alemania tras la Guerra Franco-Prusiana. Movilizado durante la Primera Guerra Mundial, es herido en combate durante la Batalla del Marney fallece en el hospital de Saint-Brieuc el 17 de octubre de 1914, hecho que propicia el traslado de la familia a Argel a casa de su abuela materna. De su progenitor, Albert sólo conserva una fotografía y una significativa anécdota: su señalada repugnancia ante el espectáculo de una ejecución capital. Ubicados en Argel, Camus realiza allí sus estudios, alentado por sus profesores, especialmente Louis Germain, en la escuela primaria, a quien guardará total gratitud, hasta el punto de dedicarle su discurso del Premio Nobel; y también Jean Grenier, en el instituto, quien lo inició en la lectura de los filósofos, y especialmente le dio a conocer a Nietzsche.
Comenzó a escribir a muy temprana edad: sus primeros textos fueron publicados en la revista Suden 1932. Tras la obtención del bachillerato, obtiene un diploma de estudios superiores en letras, en la rama de filosofía. La tuberculosis le impide participar en el examen de licenciatura.
En 1935 comenzó a escribir El revés y el derecho que fue publicado dos años más tarde. En Argelfunda el Teatro del Trabajo2 que en 1937 reemplaza por El Teatro del Equipo. En esos años, Albert Camus abandona el Partido Comunista por serias discrepancias, como el Pacto germano-soviético y su apoyo a la autonomía del PC de Argelia respecto al Partido Comunista Francés.
Entra a trabajar en el Diario del Frente Popular, creado por Pascal Pia: su investigación La miseria de la Kabylia tiene un resonante impacto. En 1940, el Gobierno General de Argelia prohíbe la publicación del diario y maniobra para que Camus no pueda encontrar trabajo. Camus emigra entonces a París y trabaja como secretario de redacción en el diario Paris-Soir. En 1943, trabaja como lector de textos para Gallimard, importante casa editorial parisina, y toma la dirección deCombat cuando Pascal Pia es llamado a ocupar otras funciones en la Resistencia contra losalemanes.
El anarquista Andre Prudhommeaux lo presentó, en 1948, por primera vez, en el movimiento libertario, en una reunión del Círculo de Estudiantes Anarquistas, como simpatizante que ya estaba familiarizado con el pensamiento anarquista.3 Camus escribió a partir de entonces para publicaciones anarquistas, siendo articulista de Le Libertaire (precursor inmediato de Le Monde libertaire), Le révolution proletarienne y Solidaridad Obrera (de la CNT). Camus, junto a los anarquistas, expresó su apoyo a la revuelta de 1953 en Alemania Oriental. Estuvo apoyando a los anarquistas en 1956, primero a favor del levantamiento de los trabajadores en PoznanPolonia, y luego, en la Revolución húngara. Fue miembro de la Fédération Anarchiste.
Su enfrentamiento con Jean-Paul Sartre tiene lugar en 1952 tras la publicación en Les Temps Modernes del artículo que éste encargó a Francis Jeanson, donde reprochaba a Camus que su rebeldía era «deliberadamente estética» expresada principalmente en la obra de Camus El mito de Sísifo. En 1956, en Argel, Camus lanza su «Llamada a la tregua civil», pidiendo a los combatientes del movimiento independentista argelino y al ejército francés, enfrentados en una crudelísima guerra sin cuartel, el respeto y la protección sin condiciones para la población civil. Mientras leía su texto, afuera, una turba heterogénea lo injuriaba, y pedía su muerte a gritos. Para él, en aquella guerra, su lealtad y su amor por Francia, no impedía el cabal conocimiento de la injusticia que vivía el pueblo argelino, depauperado y humillado, como tampoco podía impedir su amor por Argelia que se reconociera deudor de una lengua, una cultura y una sensibilidad política y social indisolublemente unidas a Francia.
Existen corrientes de opinión que afirman que esta ruptura nunca tuvo lugar realmente. La confusión entre las cartas a Sartre enviadas en la década del 1932 al 1954 fue el indicador de que Camus negaba su influencia, achacándola a 'malentendidos intencionados'. Futuras indagaciones siembran dudas sobre la autoría real de esas cartas.
Tumba en Lourmarin.
Al margen de las corrientes filosóficas, Camus elaboró una reflexión sobre la condición humana. Rechazando la fórmula de un acto de fe en Dios, en la historia o en la razón, se opuso simultáneamente al cristianismo, almarxismo y al existencialismo. No dejó de luchar contra todas las ideologías y las abstracciones que alejan al hombre de lo humano. Lo definió como la Filosofía del absurdo, además de haber sido un convencido anarquista, dedicando parte importante de su libro El hombre rebeldea exponer, cuestionar y filosofar sobre sus convicciones, y demostrar lo destructivo de toda ideología que proponga una finalidad en la historia.
Camus murió el 4 de enero de 1960 en un accidente de coche cerca de Le Petit-Villeblevin, sobre cuyas causas se han publicado posteriormente especulaciones no confirmadas.4 Entre los papeles que se le encontraron, había un manuscrito inconcluso, El primer hombre, de fuerte contenido autobiográfico y gran belleza. Camus fue enterrado en Lourmarin, pueblo del sur de Francia donde había comprado una casa.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Cambia tu lenguaje y cambiarás tu estado de ánimo




Aunque a veces utilizamos un pensamiento basado en imágenes, la mayor parte del tiempo usamos el lenguaje para pensar. Es decir, hablamos con nosotros mismos y, para hacerlo, elegimos unas palabras determinadas y no otras, y nos decimos una serie de cosas concretas.

Lo que no siempre tenemos en cuenta es la importancia de elegir unas palabras determinadas y el efecto que su uso puede tener en nosotros. Las palabras que utilices al pensar pueden tener un efecto poderoso en tus emociones y tu estado de ánimo, de modo que es importante elegirlas con cuidado. 

A continuación describiremos algunas de las sustituciones de palabras o frases que puedes hacer al pensar, de manera que puedas cambiar unas palabras o frases por otras. Si lo pones en práctica, descubrirás que te ayudan a sentirte mucho mejor, y podrás comprobar el poder que tiene el pensamiento y la importancia de usar un modo de pensar constructivo y realista.

1. Sustituye todas las palabras absolutistas, como siempre, nunca, jamás, por palabras que sean más flexibles, como a veces, a menudo, de vez en cuando, con frecuencia, casi siempre, casi nunca. Decir, por ejemplo, “nunca”, es un pensamiento extremista y la mayoría de las veces no es realista. Si dices, “nunca me mira cuando me habla”, seguramente no es cierto, y es más acertado decir “me mira muy poco cuando me habla”. Aplica la palabra "nunca" o "siempre" a sucesos que realmente ocurran siempre (o nunca), como "el sol nunca sale de noche". Para el resto, prohíbete usar esas palabras. 
 

2. Sustituye los “debo” por “deseo”los “tengo que” por “me gustaría o quiero”. Por ejemplo, en vez de decir, "tengo que ir a trabajar", di "quiero ir a trabajar". De este modo, en vez de ser una obligación, es algo que decides hacer voluntariamente. Después de todo, incluso las cosas desagradables que dices hacer por obligación, las haces realmente porque deseas hacerlas, porque es más ventajoso para ti ir a pagar ese impuesto que arriesgarte a una multa o un embargo. Es decir, lo haces porque quieres. 

Sustituye los "debería o tendría que" por "me gustaría". Por ejemplo, en vez de decir, "deberían subirme el sueldo", di, "me gustaría me que subieran el sueldo". De este modo, no transformas tus deseos en exigencias (debería) y aceptas la realidad tal y como es (aunque luego hagas lo que puedas por cambiarla), pues cuando exiges que algo tiene que ser como tú quieres que sea, te vas a sentir muy mal si las cosas te salen al revés, mientras que si te limitas a desear algo, te resultará más fácil aceptar la realidad (no se ha cumplido tu deseo), te sentirás mejor, y serás más capaz de tomar decisiones realistas y llevar a cabo acciones más constructivas que si te dejas llevar por emociones intensas como la ira o la depresión (que es lo que sucede cuando te empeñas en exigir que el mundo cumpla tus deseos).


3. Sustituye las palabras extremistas y exageradas por palabras más moderadas, como “es terrible” por “es bastante malo”; “es una catástrofe” por “es muy desagradable”. De este modo no exagerarás la "malignidad" de los acontecimientos. Si consideras que algo es terrible, pensarás que no lo puedes soportar y tenderás a huir de la situación y no afrontarla, mientras que si piensas que es muy malo pero no terrible y que, por tanto, lo puedes soportar, serás más capaz de afrontarlo y buscar soluciones.  

4. Sustituye el "todo o nada" por un continuo. Es decir, en vez de pensar que solo puede ser 1 ó 10, piensa que puede ser 1, 2, 3, 4, etc. Por ejemplo, en vez de decir, “el trabajo que he hecho es una nulidad”, di: “he hecho un trabajo de un 4”. En vez de pensar, ”como no he triunfado, he fracasado por completo”, piensa: “no he triunfado, pero tampoco ha sido un fracaso total”. De este modo no ves las cosas como éxito (10) o fracaso (0), sino que tienes en cuenta que a veces las cosas tienen distintos grados: “no es ni éxito ni fracaso, sino que merece un 5 (o un 4, un 6, etc.)”.

5. Sustituye “soy” por “he hecho”. Por ejemplo, en vez de decir “soy un fracaso”, di “he fracasado en esto”; en vez de decir: "soy una persona tímida" di "en bastantes situaciones, aunque no en todas, me comporto con timidez". De este modo, estarás siendo más realista. De hecho, cuanto menos uses la palabra soy, mejor. Céntrate en lo que haces en vez de en lo que eres: di “he hecho algo despreciable” en vez de decir “soy despreciable”. Del mismo modo, sustituye “eres” por “has hecho”: “ha hecho algo despreciable”, en vez de “es una persona despreciable”.

6. Sustituye “me haces sentir” por “me siento”. Por ejemplo, “haces que me enfade” por “me enfado”; “me pone nervioso con su lentitud” por “me pongo nervioso cuando veo su lentitud”. Eso te da más control sobre tus emociones, pues no asumes que te las provocan los demás a su antojo.
 

Resumiendo, sustituye todo aquello que sea extremista, absolutista, de todo o nada o exagerado. El objetivo es usar un pensamiento flexible, sin rigidez, que no se vaya a un extremo. Al cambiar de este modo tu forma de pensar (de hablar contigo mismo) cambiarás también tu modo de sentir.
 
Extraido de http://denkomesa.blogspot.com.es/2013/11/cambia-tu-lenguaje-y-cambiaras-tu.html


martes, 29 de octubre de 2013

sólo... soledad




Perdida en el abismo de lo infinito
sola tú, mi Soledad...
pesarosa de mi deseo
temerosa de mi soledad...
cansada ya en el estío
de tanta carga y tanta ansiedad
pesarosa del olvido
que hay en tí, soledad...

Vacuidad que llenaste el olvido
olvido que cargaste en soledad
penas que ni a coger he ido
por miedo de verlas mal...

Soledad que encumbras mi vida
penuria de soledad
no lloréis  más conmigo
no llores por caridad
pues sois vos el alma mía
el alma de soledad
que en vos siempre confío
que sin vos no hay ná

domingo, 20 de octubre de 2013

Promocionar un libro


Nota: artículo obtenido de: http://serescritor.com/promocionar-un-libro/comment-page-1/#comment-3340 


creo qu emerece la pena leerlo
Escribir, corregir, maquetar, componer, autoeditar… todo eso lo sabemos hacer, o lo podemos obtener gastando un poco de dinero. ¿Y ahora qué? La imprenta te ha enviado 500 ejemplares de la novela que terminaste de escribir hace tres meses. Ya tienes el producto, has establecido un  precio (cuidado, no te pases). Pero un plan de marketing eficaz te obliga a actuar en 4 direcciones y te faltan dos: la promoción y el canal de distribución. Si te has decidido por la autoedición y quieres cosechar un cierto éxito, tienes que cerrar el ciclo y ocuparte de estos dos capítulos. En este artículo, analizaremos el primero.
Promocionar un libro
Antes, si un escritor conseguía publicar su libro, él se desentendía de la tarea promocional, de eso se encargaba su agente o la propia editorial. Ahora, con la autoedición, ese rol lo ha de asumir el propio autor. Él tendrá que dedicar un tiempo para dar a conocer su obra, mermando así su capacidad para abordar un nuevo proyecto. Es una trabajo que muchos escritores se niegan a realizar, por considerarlo indigno a su condición, una actitud que yo no voy a discutir. El problema es que si nadie realiza esa labor, lo probable es que no venda más de 50 ejemplares, lo que a muchos les importa un bledo, si escriben por diversión.
Pero si el escritor quiere ganar dinero con su libro ─o lo necesita porque vive de ello─, no tendrá más remedio que aplicarse en la promoción. El comprador de un libro adopta una actitud vehemente de adquirirlo en el momento que lo asocia con un escritor del que posee una opinión favorable. Pero si nunca ha oído hablar de él, le provoca una sensación de rechazo difícil de superar.
Mas ¿cómo un autor desconocido puede llegar a la fama? ¿por qué un escritor mediocre arrasa con un bestseller de escaso mérito y otro más exquisito no acierta a salir de la penumbra? Le falló la promoción, la publicidad, seguro. El problema es que todo eso cuesta dinero y un escritor diletante que acaba de escribir su primera novela no lo tiene. Vayamos por partes:
Primera fase. El mercado local
Primero acometer el ámbito local, limitado a la ciudad en que vives y quizá sus alrededores. Es importante obtener un cierto éxito allí donde la gente te conoce, al menos, para saber si la novela tiene algún mérito. Aunque los comentarios que vas a recibir de viva voz sean elogiosos, tú tienes criterio suficiente para juzgar los matices, la forma en que se dicen, para concluir si vale la pena continuar.
¿En qué consiste ese trabajo? En un cúmulo de pequeñas actuaciones que empiezan por darte a conocer a la prensa, tanto la escrita como la radio, contactar con los responsables de la sección de cultura, normalmente, atienden a los autores de la cantera. Un consejo: dáselo todo hecho (la foto y la biografía del autor, la imagen de la portada, sinopsis, comentarios de los colegas, reseñas de los eventos, incluso la entrevista ya escrita con la sarta de preguntas y respuestas), que no tengan que inventar nada nuevo.
Pero antes, habrás tenido que distribuir ─sí, tú mismo, con tu coche─ los libros en las librerías de la ciudad para que los lectores interesados lo puedan comprar, tras haber escuchado un elogio en los medios, sin olvidar a esas librerías de barrio que venden periódicos y un poco de todo, sus propietarios suelen ser buenos prescriptores, incluso te dejarán un rincón de su establecimiento, un domingo por la mañana, para que vendas tu libro (con un porcentaje para ellos) y lo dediques a quien lo solicite (yo lo he hecho tres veces en mi barrio, y he colocado 68 ejemplares). Y si tienes que exponer en un mercadillo local en el que haya libros viejos, no te amilanes. Hazlo, disfrutarás de lo lindo, aunque alguno te pueda acusar de desprestigiar la profesión.
Resulta también eficaz hacer la presentación del libro en bibliotecas y casas de cultura. Si haces propaganda del evento (carteles colocados en sitios estratégicos, prensa y radio), y cuentas con la colaboración de un presentador de prestigio, puedes conseguir hasta 50 asistentes y, a su término, vender 20 ejemplares firmados, si pones la guinda de un precio rebajado.
Al final, se trata de armar ruido, cuanto más, mejor. El objetivo es que, a nivel local, consigas unos ingresos suficientes para recuperar la inversión, eso se consigue con 300-400 ejemplares vendidos. En esta primera parte, dedícate nada más a eso, a la promoción, es un trabajo arduo pero produce satisfacción. Y cuando lo hayas conseguido, tienes recursos económicos para pasar a la siguiente.
Segunda fase. El mercado global
Es el momento de dar el salto a lo global. Y aquí no hay ninguna duda, lo global es Internet. Si las nuevas tecnologías amenazan a la industria editorial, para el escritor diletante representan una oportunidad. El año pasado, los títulos autoeditados fueron más que los que publicaron las editoriales tradicionales. Y la Feria del Libro de Fráncfort, que cerró el domingo pasado dedicó por vez primera un espacio específico a este subsector, agrupado con un prometedor (o inquietante) título: la próxima generación. La conjunción entre Internet, la edición digital y la impresión bajo demanda ha empezado a dar sus frutos y los escritores han empezado a comprender que ya no necesitan a los editores, lo cual no quiere decir que éstos vayan a desaparecer, se especializarán en nichos o se centrarán en los autores consagrados.
Hace unos meses, leí el caso de Eloy Moreno, un joven castellonense de 37 años que decidió emprender su propio proyecto editorial con su primera novela, “El bolígrafo de gel verde”. Primero, tienda por tienda, y luego a través de Internet, llegó a vender más de 3.000 ejemplares. Este éxito hizo que la editorial Espasa decidiera reeditarla en 2011 y ya se han realizado trece ediciones, con más de 100.000 ejemplares vendidos. La novela ha sido traducida al catalán, el italiano y el holandés y, recientemente, al taiwanés. Todo un ejemplo.
Pues bien, si has superado la primera fase, se trata ahora de situar tu novela en las tiendas de venta de libros online. ¿En cuáles? En todas las que puedas. Te sugiero Amazon, Barnes & Noble, Google Play, iBookstore, Kobo, Lulu, y Bubok para los lectores de habla hispánica. ¿ Y cómo se hace eso? Los que saben dicen que es fácil, pero a mí no me lo parece, hay que tener algún conocimiento informático, si no te vuelves loco. Lo mejor, es contratar el servicio de un experto. Por menos de 100 euros y quizá un pequeño porcentaje sobre los ingresos obtenidos, lo puedes conseguir, para el amntenimiento. Pero si lo quieres hacer tú mismo, en este enlace encontrarás una buena ayuda.
Ya tienes tu libro colgado en los portales más importantes del mundo al que acceden millones de compradores, pero oculto en un bosque de también millones de libros. ¿Crees que alguien se va a fijar en el tuyo? No. Tienes que hacer algo más. Igual te conviene hacer algo de publicidad. Creo que no es una mala idea. Existen varias formas de hacerlo sin gastar mucho dinero ─para eso tienes ese remanente que has obtenido en la primera fase─, pero explicarlo igual exige un artículo nuevo más adelante. Mientras tanto, te sugiero que leas la anécdota que nos cuenta José Antonio Espinosa en su blog.

jueves, 10 de octubre de 2013

La canadiense Alice Munro gana el Nobel de Literatura

La escritora canadiense Alice Munro es la ganadora del Premio Nobel de Literatura 2013. “Maestra del relato corto”, según el dictamen de la Academia sueca. Munro nació en Wingham (Ontario) en 1933.
Conocida como "la Chéjov de Canadá", Alice Munro construyó la base del realismo moderno canadiense, que en el país vecino, Estados Unidos, se había cimentado mucho antes. Se inició en la literatura a los 30 años, con cuentos y relatos que vendía para la radio pública canadiense. Reconoció el influjo temprano de otras grandes escritoras como Katherine Anne Porter, Flannery O’Connor, Carson McCullers y Eudora Welty, así como de autores de la talla de James Agee y William Maxwell. Ganó varios premios en su país y en otras naciones. Ha sido traducida a trece idiomas y ya había aparecido varias veces en las listas de candidatos al Nobel.

Algunos de sus libros

Las lunas de Júpiter (1982, edición original)
Progreso del amor (1986)
Amistad de juventud
 (1990)
Secretos a voces (1994)
El amor de una mujer generosa (1998)
Odio, amistad, noviazgo, amor, matrimonio
 (2001)
Escapada (2004)
La vista desde Castle Rock
 (2008)
Mi vida querida 
(2013)
Sólo en los últimos años se ha difundido la mayoría de sus libros en español. De los treces libros que lleva publicados se conocen en castellano los siguientes: Las lunas de Júpiter (1982, edición original),Progreso del amor (1986), Amistad de juventud (1990), Secretos a voces(1994), El amor de una mujer generosa (1998), Odio, amistad, noviazgo, amor, matrimonio (2001), Escapada (2004), La vista desde Castle Rock(2008) y Demasiada felicidad, conocida en 2009 pese a que antelación había anunciado su retiro definitivo de la literatura. Siete de sus ficciones han sido llevadas a la pantalla, especialmente a la televisión. Sarah Polley filmó en 2006 Lejos de ella, con Julie Christie, basada en uno de sus cuentos. La última novela que se publicará próximamente en España por la editorial Lumen lleva el título de Mi vida querida.



Alice Munro, author of Too Much Happiness

miércoles, 9 de octubre de 2013

PABLO GUERRERO Rezitando

Pablo Guerrero en la "Casa de Zitas" el pasado día 5 de octubre... con esa voz profunda, oscura y al mismo tiempo generadora de paz y de serenidad... Oyéndolo me recuerda a Leonard Cohen, tal vez por eso me he tomado la libertad d e denomiinarlo el "Cohen hispano"

miércoles, 2 de octubre de 2013

Antonio Carvajal, poeta de "cabo a rabo"

sencillamente, un poeta andaluz... premio nacional de poesía 2012

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Demagogia… inconsciente y global



            Cada 11 de septiembre como siempre y sin tarjeta, decía la canción de Janet…, pero aquí la letra se escribe algo diferente.

            Cada 11 de septiembre recordamos, rememoramos, ensalzamos, ponemos en primera línea de todos los telediarios y noticiarios, especialmente gráficos, la misma imagen, la misma historia, la misma leyenda… Y es cierto, fue, posiblemente la tragedia más grave de un país en período de paz que se conoce. Se habla de muertos, de barbarie, de tremendísimos disgustos y de cientos, por no citar miles de familias rotas, deshechas, destrozadas y hundidas por no hablar de empresas y factores d eíndole tal vez más económico sí pero que también estuvieron ahí y hoy, que la crisis aún es más acuciante tal vez se comprenda mejor… Es cierto, “The worl Trade Center” murió y con él miles de personas, y un icono de la economia norteamericana… pero… ¿Alguien ha mirado la otra cara d ela moneda? ¿Alguien es consciente de…?

-         cada 11 de septiembre Al Qaeda tiene publicidad gratis, es cierto, en este caso están en el bando de “los malos” pero están y cuando rememoras todo aquello rememoras aquello que para ellos sí fue una victoria
-         cada 11 de septiembre le decimos al mundo “somos vulnerables”, somos débiles, apenas si contamos con algo que podamos hacer si nos queréis hacer daño
-         cada 11 de septiembre enarbolamos el sentimiento de culpa y, de un modo inconsciente por supuesto ensalzamos nuestro orgullo y nuestro “ego” de estar vivos y ser “de los buenos”.


Por supuesto, yo, Rafael Castro Martín, mayor de Edad, y Español que reside en España condeno públicamente… no, condené públicamente el atentado en su día y en su momento… pero hoy, 11 de septiembre de 2013, solicito que no se rememore la tragedia, la barbarie, el genocidio, la brutalidad ni la estupidez a la que el ser humano puede llegar y llega en tantas ocasiones.  Hoy yo reivindico que el 11 de septiembre de 2001 también aprendimos que tdoos somos miembros de una misma realidad llamada Humanidad, que si podemos y unimos fuerzas el amor de millones de seres son capaces de levantar d ela nada una zona cero más en paz, en luz y armonía, que si luchamos o decidimos luchar lo hagamos con uñas y dientes, pero sobre todo con el corazón pero no contra árabes, israelíes, coreanos… no contra armas químicas, no contra la desigualdad… luchemos

A FAVOR…

repitanselo en su cabeza

A FAVOR…

¿Cómo?

A FAVOR,  por FAVOR

Y ustedes dirán ¿de qué?

De la paz entre todos más allá de intereses políticos enmascarados de creencias que ya nadie cree porque no se sabe qué hay que creer y qué no

De la vida en estado pura, de fluir y ser fluido, de sentir como cada día sale el sol y la maravilla de sentir como la luz del sol te permite que cada mañana la luz y el color de la vida penetre en tus pupilas y tu cerebro descubra la grandeza de estar vivo

Del equilibrio entre todos con todos y para todos, porque la magia d ela diferencia es la que nos hace equlibrarnos ¿Es acaso igual un muelle de un trozo de hilo… no, y sin embargo juntos forman parte de un colchón ¿Son iguales los cubos y las esferas? Y sin embargo forman edificios con ladrillos y rodamientos… los franceses ya lo decían en una frase genial “¿Vie la diference!!!” viva la diferencia, por supuesto porque en la diferencia esta la belleza del equilibrio.


En una ocasión a la Madre Teresa de Calcuta, una de las mujeres con más carácter y más personalidad y al mismo tiempo más corazón que conoció el siglo XX le preguntaron

-         “¿Cuándo vendrá a una manifestación contra la guerra? –

Mas ella siempre contestaba con genio y muy seria

-         NUNCA, cuando hagáis una a favor de la paz, ahí estaré yo como abanderada, defendiendo la paz, el amor, la armonía, la vida… pero si lo que  quereis es regodearos en el dolor y el sufrimiento, en la pena y la soledad que da la ira y el resentimiento… ahí no me veréis



Evidentemente creo que ni en mi imaginación y presumo de tener mucha, llego ni de lejos a tan insigne mujer pero sí quiero ser el humilde relevo de esta enseñanza, dejemos de luchar contra de … y vayamos a favor de…


Muchas gracias  y no lo olviden este pareado


A FAVOR
POR FAVOR


Rafael Castro Martin
Lince Apache

lunes, 2 de septiembre de 2013

"30 días"

Después de 30 días de asedo... 30 días donde uno está casi obligado a sonreir por todo, de noches sin dormir, comidas  incesantes de tanta cosa buena y bebidas que finalmente ni saboreas pues ya el gusto se te quedó en el tercer mojito y el cuarto daikiri...  finalizados 30 días de agotador calor, tormentosas torturas al sol de la playa y la arena tórrida de la playa... entre los niños chillando, la abuela quejándose, el del chiringuito con sus bebidas de hielo ardiente, que queman de frío y el negro que nos ofrece barrato peíículas comprame papi anda...,  no se ya si bélicas, de acción o porno... por no saber de qué eran aquellas cosas que traía... comprendí cuan grande es la resistencia del ser humano.

Si a todo ello le sumas la incesante guerra de guerrillas  ala qu ellamamos "hijos" eufemísticamente hablando, donde está la frase "papá quiero" acompañada por "mamá me dejas" o aquella de "por fa..."   que bien podía ser un mininutivo de "no sé por qu´ecoño me tienes aquí retenido cuando yo quiero irme  al agua  para poder seguir haciendo el animal como me enseñan en la tele", Si todo eso va uni, y no restando sino en dolorosa suma, la batalla y la resistencia del ser humano se une  ala de ser padres, que es en definitiva otra gran batala de superación personal entre uno y sí mismo para poder seguir soportando el dí a adía.

Todo eso, así, tal cual como suena, sin eufemismo y sn mayores endulzamientos es lo qu epodría denominar "vacaciones d eunos padres", lógicamente or algo tardamos luego 11 meses en reponernos d esemejante trabajo, del cual en algunos momentos, vease Navidad y otras fiestas igual de interesantes como absurdas, nos van forjando en nuestra vida diaria siendo, si hay suerte un poco más tolerantes y flexibles o partiendonos de l arigidez qu , en el mejo rd elos casos nos conduce a la estupidez en su máxima expresión.

30 días, fueron, aun cuando los empresarios dicen que nos dan 20 de "vacaciones" que en la profesión de ser padres no existe, fueron 30 días que finalmente son recompensados con la belleza de tener una actividad laboral remunerada con el pago bien ganado de un salario no se i digno pero si justo y necesario... Así pues, volvemos  ala rutina, a hacer lo de siempre, a prometer que perderemos esos kilos que engordamos  agolpe de talonario y tanto nos costó conseguir, y más nos costará perder, prometeremos aprender inglés, llevarnos bien con los hijos y la suegra... dejar de fumar, no decir palabrotas, incluso escribir a los reyes magos... sin faltas de ortografía... y todo, todo en treinta días  a los que les llaman "Agosto" por "augusto", sí sin duda es un augusto mes, grande donde lo hubiere ya que, aun teniendo los mismos días que otros muchos en determinadas ocasiones se hace bastante más lardo y tedioso..

Así pues, finalmentge, resistidas todas las azañas del momento aun cuando estemos como decía el poeta "Cansados maestro... cansados" la vida bien vale un mes de septiembre para comenzar a descansar y tener "las vacaciones de las vacaciones" autentico elixir de campeones.




jueves, 29 de agosto de 2013

miércoles, 14 de agosto de 2013

Tres error que al escribir te delatan como "NOVATO"

Texto extraido de: http://www.falsaria.com/blog/tres-errores-al-escribir-que-te-delatan-como-novato/


Writer - Scrittore

Nadie nace enseñado. Todos hemos aprendido a leer y escribir en la escuela, incluso nos han enseñado reglas básicas de redacción. Como en la caligrafía y en la gramática, en los comienzos de la narrativa es sencillo cometer fallos muy elementales. Al igual que con el tiempo aprendiste a escribir sin (apenas) faltas de ortografía, con el tiempo puedes mejorar el estilo de tus textos. Observa estos tres errores al escribir en los que todo narrador ha caído en sus inicios y comienza a detectarlos.

Que sencillo es abusar de los adverbios terminados en “-mente”. Es cómodo, práctico, eficiente… y feo. Delatan dos rasgos principales de un escritor que no le hacen quedar en buen lugar:
  1. Escritor novato, con poca práctica en el dominio del lenguaje y sus normas.
  2. Escritor perezoso, que no revisa a fondo el texto.
No estoy diciendo que estos adverbios sean feos e ineficientes. Lo que es malo es la repetición constante de los “obviamente, cabalmente, constantemente, realmente, simplemente…”Observa la cantidad de ellos que utilizas. Si en un mismo párrafo o en párrafos seguidos, has usado dos o tres, seguro que puedes sustituir algún “desgraciadamente” en un “por desgracia…”
Puedes escribir tantos “-mente” como quieras cuando estés creando. Ayuda a avanzar porque es el recurso fácil, no te obliga a detenerte para buscar una frase mejor y así puedes continuar tu vorágine creativa. Pero después, en la fase de revisión, fíjate cuántos de ellos puedes eliminar.
Seguramente te sorprenderás. Mejor dicho: con toda seguridad quedarás sorprendido.
Ten en cuenta estas normas de estilo cuando decidas emplear un adverbio terminado en “-mente”:
Conservan el acento de su raíz: débil = débilmente; jamás se acentúa la terminación.
Si quieres poner dos de ellos seguidos sólo es necesario mantener la forma “-mente” en el último: “Se tendió allí, dulce y serenamente”…
…o bien separar dos de ellos por comas para dar un matiz más subjetivo: “Se tendió allí dulcemente, serenamente.”
Debes evitar la forma enfática “yo personalmente”: es una redundancia.
Los adverbios “mayormente” y “mismamente” son considerados vulgarismos. Las formas más acertadas son:
Mayormente = principalmente
(o también “sobre todo” si quieres evitar el adverbio)
Mismamente = precisamente
Truquillopuedes usarlos para ponerlos en boca de personajes, en el diálogo, cuando quieras resaltar su escasa cultura.

Recuerdano es malo usar estos adverbios, lo realmente malo es abusar de su utilización.

Comienzas a escribir, te entusiasmas, te metes en la historia, te apasionas, las palabras acuden a ti como un torrente, no puedes parar de escribir, las escenas se agolpan, los acontecimientos se suceden… en algún momento has pasado de contar tu historia en tiempo pasado a tiempo presente. O al revés. O a ratos en uno o en otro tiempo, según tu inmersión en el relato.
Es muy corriente que suceda esto, no te preocupes. En fases avanzadas de escritura incluso se puede utilizar como recurso narrativo (escribiré un post sobre esto cuando hable del tiempo narrativo y los puntos de vista).
También es frecuente cambiar la persona gramatical del narrador: comienzas contando la historia en tercera persona (él hacía) y pasas a contarla en primera persona (yo hacía).
De nuevo te aconsejo que no detengas ese estado de creatividad torrencial para subsanar este error. Para eso está la revisión, pero debes tomar conciencia del problema cuando corrijas. Con la práctica dejarás de saltar de un tiempo verbal a otro y a ser más consciente de tu propia voz narrativa, así como de la voz del narrador.
Recuerda: debes tener en cuenta el tiempo verbal con que empiezas a narrar y la persona gramatical del narrador.

Este es un fallo a menudo difícil de detectar sin una lectura a fondo. Se produce cuando una situación se resuelve de manera “milagrosa” o un personaje cambia de actitud o pensamiento sin que un acontecimiento provoque dicho cambio. Es decir, saltarse a la torera la máxima siguiente: todo efecto está precedido por una causa.
Ejemplo: “el hombre estaba sentado, contemplando en un estado absorto cómo crecía la hierba de su jardín. De repente, se levantó presa de un frenesí incontenible y se dirigió a la cocina, donde devoró con ansía un bocadillo de chorizo”.
¿Cuál es el desencadenante de ese frenesí incontenible? ¿Cuál la sucesión lógica de pensamientos que le hace levantarse, que le hace ser consciente del hambre?
Cuidado con los “de repente, de pronto, en un momento dado…”
Puedes hacer actuar a tus personajes por impulsos, hacerles tener reacciones imprevistas… pero asegúrate de dejar claro que los personajes se comportan así por un motivo que les hace ser así.
Igual sucede con las situaciones. No puedes resolver un asesinato sin haber hallado todas las pistas. Pasito a pasito, siguiendo una sucesión coherente de acontecimientos. Queda fatal, dicho sea de paso, sacar un as de la manga en el último instante para cuadrar algo que no has sabido resolver. ¿Al asesino se le cae del bolsillo el casquillo de la bala asesina? ¿Es esa la prueba irrefutable? ¡Vamos, anda, no me tomes el pelo! Porque esa sensación es la que le produce al lector.
En tu relato o novela nada debería suceder por azar, y cuando esto suceda, debes decirlo, remarcarlo, dejar patente que la casualidad juega un papel relevante en la historia; que es casi protagonista. De todas formas, la suerte o el azar pueden ser consecuencia de una cadena de acontecimientos cuyas causas que los ponen en marcha desconocemos.
El escritor Paul Auster domina a la perfección este concepto, el cual ha llegado a ser una parte central de su temática, casi una obsesión… a menudo no bien entendida.
Recuerda: cada acto tiene su consecuencia y cada consecuencia está asociada a los acontecimientos precedentes y también a los futuros. Cuando escribas ten presente este principio:
Toda acción conlleva una reacción, no hay reacción sin una acción previa.

En conclusión
Prestando atención a estos tres detalles, mejorarás sensiblemente tus textos. Denotará preocupación por la forma de escribir, un cierto cuidado en lo que dices y cómo lo dices. Es un signo de profesionalidad, de conocer las reglas básicas del oficio, de no ser un novato en cuestiones narrativas.
Todos, repito, todos los escritores hemos caído en algún momento dado en estos errores. No se nace enseñado, son fallos básicos, son parte del proceso de aprendizaje. Es incluso positivo cometerlos en estadios tempranos de la creación narrativa: ayudan a estar alerta, a tomar en serio las revisiones necesarias.
Se pulen con práctica y, aunque no sea así, en el proceso de corrección se pueden subsanar con mucha facilidad… siempre y cuando sepas detectarlos.